La Super Bowl de Katy Perry
La cantante californiana fue la estrella del espectáculo junto a sus invitados especiales Lenni Kravitz y Missy Elliot que pusieron una mezcla explosiva
Katy Perry mantuvo encendido en el descanso de la Super Bowl al estadio de la University of Phoenix, después de que los Patriots y los Seahwaks jugasen un partido lleno de emoción con unas jugadas tremendas, un gran espectáculo deportivo que despertó a todo el mundo. Pero llego el descanso, 14-14 y era el turno de la estrella pop, Katy Perry, la chica de los grandes videoclips y de los colores. Era el turno de hacer magia en el descanso y ofrecer a todos los americanos lo que tanto esperaban.
La californiana cantó 7 de sus mejores canciones entre más de 70.000 personas de público y tuvo varios invitados de lujos. La cantante apareció en escena con un león gigante, mecánico, cantando su tema de 'Roar', con un vestido diseñado para ir a juego con el fuego, dominando así al león, toda una metáfora. Al acabar la canción comenzó a cantar 'Dark house' cambiando totalmente el atuendo encima de un ajedrez con personas vestidas de caballos.
Los cambios de ropa eran completamente rápidos algo que sorprendía al público, hasta que salió Lenny Kravitz con su guitarra cantando junto a Katy Perry. Una mezcla de estilos y sonidos que incendiaron el estadio, al igual que también junto con la rapera Missy Elliot que cantó dos canciones para dar un espectáculo de hip-hop, algo que agradecieron los americanos. La cantante californiana también cantó temas como 'California Girls', entre otros, vestida de colores, una playa, delfines bailando y pelotas de playa.
Pero el final fue lo que mas gustó a todos los americanos con su 'Firework', cuando Katy Perry vestida de plata comenzó a volar por todo el estadio cogida de una plataforma mientras iba volando de un lado al otro y saltaban los fuegos artificiales. Y es que Katy Perry no es la típica cantante que enseña un pezón, ni hace peinetas ni gestos obscenos. Es una joven californiana, el ejemplo de la 'it girl' y 'cool girl', lo suyo es otra cosa.
La cantante es más de colores, estribillos pegadizos y mucha sonrisas, lo suficiente sexy para gustar a todos los americanos sin ser más que ella misma. Justo lo que necesitaba la Super Bowl después de todos los escándalos de violencia de género que han ido surgiendo este año, la mujer perfecta que transmite alegría y paz para resolver la mala imagen de la NFL.
Aquí pueden los primeros minutos del espectáculo: