La piratería musical no ha muerto, se ha vuelto móvil
La piratería musical, la cual ha llevado de cabeza a sellos desde hace más de una década está cambiando y ahora se realiza desde dispositivos móviles
El auge del streaming, el abaratamiento del audio digital, la subida de ventas de vinilos, iniciativas culturales basadas en micromecenazgo o webs como Bandcamp o Soundcloud habían hecho creer a muchos que la piratería de música estaba cayendo en picado. La realidad es muy diferente, la descarga ilegal de música se mantiene, sólo ha cambiado de forma. El avance de las tecnologías móviles (smartphones y tablets), las conexiones 3g y 4g, y la bajada de ventas de ordenadores personales son algunas de las razones de este cambio.
La consultora NPD Group ha presentado un estudio sobre hábitos de consumo cultural y los datos que arroja son muy claros, la gente descarga la música directamente desde sus móviles. El bajo control al que se exponen las aplicaciones en Google Play ha disparado el número de desarrollos especializados en la descarga de audio pirata. Sólo en los últimos meses, 27 millones de estadounidenses han descargado ficheros MP3 a sus dispositivos Android.
En Google Play ya hay disponibles más de 250 aplicaciones enfocadas a la descarga de música. Entre todas ellas destaca por Music Maniac, la cual se ha descargado más de 10 millones de vez y subiendo.
La RIAA (Recording Industry Association of America) está empezando a tomar medidas de presión para que sea más complejo publicar en plataformas de distribución herramientas que faciliten la piratería, pero por el momento el único que tiene la palabra es Google, el gigante de Internet.