Bono, la caridad y la irrelevancia de U2
Bono es para muchos ejemplo de persona y de músico. Para otros es un impostor, un artista que chantajea de manera cutre al público con campañas caritativas
Las campañas de marketing son cada vez más enrevesadas y retorcidas. Dado que 2014 será un año de grandes lanzamientos (ale, topicazo editorial), todos quieren destacar y hacer que sus trabajos suenen más lejos y más alto. U2 parece que no ha empezado mal la campaña publicitaria del que será su próximo álbum, del que muy poco se conoce: está producido por DJ Danger Mouse y sus dos primeros sencillos son Ordinary Love e Invisible.
El primero de los singles ya se ha llevado un Globo de Oro, se llevará el Óscar a la mejor canción original y es el tema principal de Mandela. Del mito al hombre. Invisible, el segundo de ellos, empezó a distribuirse gratuitamente el domingo día 2 de febrero y por cada descarga un dólar era donado por el Bank of America al fondo global contra el sida, la malaria y la tuberculosis. La iniciativa ha ido bien y se han recaudado más de 3 millones de dólares.
Estas iniciativas son buenas, pero Bono trata de vender su música con una doble moral un tanto extraña. Es amigo de algunos de los genocidas más brutales de nuestro tiempo, chantajea moralmente al mundo para que se descargue su single practicando una caridad comparable a la de la Iglesia Católica de la Edad Media y se ha convertido en el vocero de las élites neoliberales, las mismas que han llevado a la quiebra a medio planeta y que ahora con el líder de U2 como imagen pretenden lavarse las manos donando migajas a los enfermos por enfermedades terribles.
Para más inri, el artista va saltando de estudio en plató haciendo campaña de su disco (que será un superventas por castigo) y llorando en los programas importantes, asegurando que su grupo ya no es relevante y que tendrá que planificar sus giras por espacios más pequeños, como el O2 Arena de Londres, el cual se caracteriza por ser una caja de zapatos.
"Como estrella del rock tengo dos instintos: divertirme y cambiar el mundo. Tengo la oportunidad de hacer ambas cosas."
Paul David Hewson "Bono" (antes de trasladar sus factorías de África a China)
La figura del músico salvador de los pobres se desvanece a marchas forzadas. En los últimos años le han pillado saqueando laboralmente pueblos a los que públicamente ofrecía ayuda humanitaria, evadiendo impuestos de forma masiva de sus giras y merendando con grandes personajes como George W. Bush. Uno, dos, tres, catorce,…